Hoy Insulinrock nos habla de un tema que nos ha parecido la mar de curioso: ¿cómo se miden las raciones de hidratos en cada país?
En nuestro día a día cuando convivimos con la diabetes, una de las tareas más tediosas, pero a la vez más necesaria, es la del contaje de raciones de carbohidratos. Es el precio que tenemos que pagar, sobre todo, si queremos ajustar nuestra terapia con insulina a lo que vamos a comer y no al revés; pero ¿sabías que no en todo el mundo las raciones se cuentan de la misma manera?
Aquí, en España, las raciones se cuentan de manera estándar como 10 gramos de carbohidratos. Esta es una equivalencia muy sencilla y práctica, sabiendo, además, que en el etiquetado alimentario aparece la cantidad de carbohidratos por cada 100 gramos; el cálculo rápido se hace bastante más fácil. En Reino Unido también se usa este sistema de raciones a las que llaman carbohydrate portion (porción de carbohidratos) y se puede encontrar abreviada como CP.
En Alemania se utiliza un sistema en el que una ración equivale a 12 gramos de carbohidratos a la que llaman Bread Equivalent (unidad de pan), que puede aparecer abreviado como BEN o BE. Esta forma de contar los carbohidratos está desapareciendo a favor de las raciones de 10 gramos por su mayor facilidad a la hora de realizar cálculos; a estas raciones de 10 gramos en Alemania se las llama kohlenhydrateinheit y se abrevia como KE (seguro que te suena esa KE de algún calculador de bolos...)
En varios países de Latinoamérica, como México, la ración equivale a 15 gramos de carbohidratos. Se refieren a esta proporción como carbohidrato choice (intercambio de carbohidrato) y puede aparecer abreviado como CC.
¿Os parece un lío? Atentos que ahora viene el "más difícil todavía" pues según las últimas recomendaciones de la ADA (Asociación Americana de Diabetes), en Estados Unidos, una ración de verdura equivale a 5 gramos de carbohidratos, una ración de fruta a 10 gramos de carbohidratos, para los farináceos son 15 gramos de carbohidratos y para la leche 12 gramos de carbohidratos.
Lo único que podemos sacar en claro de todo esto es que hay un punto en común y este es que la equivalencia de todas estas raciones se hace en gramos prescindiendo de las medidas de peso imperiales basadas en la libra y la onza utilizado en UK y EEUU entre otros por lo que ya muchas calculadoras de bolo están estableciendo la relación insulina-carbohidratos directamente en gramos.
Mucho más sencillo, ¿no crees?